Fragilidad...

Mirarte en el espejo recién levantada, y que te falten sus brazos rodeando tu cintura y sus labios acariciándote la oreja.
Devolverle la mirada a ese reflejo cansado de ti, y faltar su imagen a tu lado...
Deshacerse entre sueños que recuerdas como reales, dejándote llevar, queriéndole y demostrándolo de la mejor forma posible...
Volverte loca y despertar cuerda, pensando cuanto te ha costado abrir los ojos a lo que verdaderamente importa, él.